Identificar para qué etapa de desarrollo de la mascota está hecho el alimento: cachorro, adulto o senior.

Conocer la lista de ingredientes ordenados por peso de mayor a menor y la proporción de agua que contiene el alimento. Si el primer ingrediente de la lista es carne, es una buena señal.

Proporciones. Por ejemplo, si dice “rico en carne”, debe tener al menos un 14% de este ingrediente. Pero si dice “con carne”, entonces la proporción es mucho menor (máximo un 4%).

Aditivos. Aquí se encuentran las vitaminas y minerales para mantener un buen estado de salud. Hay que tener en cuenta que existen los alimentos que usan ingredientes sin químicos para obtenerlos, privilegiando así un tipo de nutrición más natural.

Todas las etiquetas de los alimentos para perros y gatos deben indicar la cantidad mínima de proteína y grasa que contienen, así como el porcentaje máximo de fibra.

También debes fijarte en la fecha de elaboración, ya que con el paso del tiempo los nutrientes se van degradando, bajando así la calidad de la alimentación de tu mascota.